38 años después: Reflexiones sobre la Tragedia de Armero y las lecciones aprendidas

Hoy, se cumplen 38 años de la trágica erupción del volcán Nevado del Ruiz, que desencadenó el mayor desastre registrado en Colombia: la devastadora tragedia de Armero. Este evento dejó un saldo desgarrador de 25 mil fallecidos y miles de heridos, consolidándose como la segunda erupción volcánica más mortífera del siglo XX en el país.

En este aniversario, el Servicio Geológico Colombiano (SGC), entidad encargada del monitoreo de la actividad volcánica a nivel nacional, destaca cinco lecciones cruciales que la erupción de 1985 dejó marcadas en la historia de la vulcanología y la gestión del riesgo de desastres en Colombia.

1. Es posible prevenir tragedias como la de Armero:
   Aunque no se puede prever una erupción volcánica, la experiencia demuestra que la preparación y la respuesta oportuna pueden salvar vidas. La erupción del volcán Nevado del Huila en 2007, con flujos de lodo más voluminosos que los de 1985, ilustra cómo una reacción rápida de las autoridades y las comunidades puede proteger a la población.
2. Ordenamiento del territorio basado en información geocientífica:
   La tragedia de Armero resalta la responsabilidad de las administraciones locales en el ordenamiento del territorio para prevenir o reducir el riesgo. La necesidad de tomar decisiones basadas en información geocientífica se hace evidente, y el SGC ha desarrollado 14 mapas de amenaza volcánica para respaldar este proceso.
3. Necesidad de sistemas de monitoreo volcánico:
   En 1985, la falta de un sistema de monitoreo en tiempo real impidió detectar la erupción. Desde entonces, Colombia ha implementado un sistema que actualmente monitorea 25 estructuras volcánicas activas, emitiendo información oportuna tanto a autoridades como a la población.
4. Importancia de información oportuna y veraz:
   Más de 25 mil vidas se perdieron en Armero debido a la desinformación. Desde entonces, el país ha fortalecido sus sistemas de monitoreo y difunde información constante sobre la amenaza volcánica, destacando la importancia de una comunicación clara y unificada.
5. Cultura volcánica para comunidades en riesgo:
   Dada la ubicación geográfica de Colombia, es esencial consolidar una cultura volcánica. La tragedia de Armero subraya la importancia de que las comunidades en zonas de riesgo conozcan su entorno, la historia volcánica y las medidas necesarias para salvaguardar vidas en caso de una erupción.

En este contexto, el SGC, como entidad clave en la investigación geocientífica y la gestión del riesgo, continúa su labor para proporcionar información confiable y oportuna, contribuyendo a la seguridad y el bienestar de la población colombiana.